El arbitro Ericsson desde mi punto de vista ayer perjudicó claramente al Liverpool, no viendo dos penaltis evidentes a su favor.
La final tuvo dos partes. En la primera Liverpool fue muy superior al Sevilla, adelantándose en el Marcador con un golazo. Pero en la segunda mitad Unai Emeri supo dar la vuelta al partido y a la final disputada anoche en Basilea gracias a sus cambios tácticos. Su equipo salió muy "enchufado" y anuló por completo al Liverpool del partido y de la final.
El equipo andaluz fue dueño y señor del encuentro durante toda su segunda fase, en la que consiguió remontar por 1-3.
Un partidazo de los dos equipos que tuvo de todo: fútbol, jugadas polémicas, nervios y mucha emoción.
¡Mi más sincera enhorabuena al Sevilla por ser campeón de la Europa League otro año mas!
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